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“Señor, ¿quién puede vivir en tu templo?” es la pregunta de Salmos 15 con la que comenzaron las oraciones matutinas pronunciadas el sábado, 3 de septiembre en el marco de la 11^a Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) celebrada en Karlsruhe (Alemania).

El primer día de septiembre, el día ortodoxo de oración por la creación y el inicio del Tiempo para la Creación celebrado por la comunidad ecuménica, los participantes en la 11^a Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) se reunieron para la oración matutina recordando el deber de los creyentes de actuar como custodios y beneficiarios de la creación de Dios. El acto litúrgico central del servicio de oración fue mezclar jarros de agua de cada región habitada de la Tierra, juntando en un solo lugar las aguas, como símbolo del acto primero de la creación en Génesis 1:9.

En una gloriosa mañana de viernes, la carpa de oración de la 11ª Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) en Karlsruhe se llenó del canto entusiasta de himnos, respuestas litúrgicas y canciones de alabanza en alemán, inglés, español, árabe, maohi, estonio y xhosa.

El 1 de septiembre señala el comienzo del Tiempo de la Creación, cinco semanas del calendario litúrgico reconocidas por la comunidad del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y, desde 2015, también por la Iglesia Católica. Se trata de una demostración especialmente religiosa de la preocupación por el planeta y por las amenazas para la supervivencia de la Tierra como la conocemos.

En Harare se llamaba padare, procesión pública que celebra un día o un evento especial; en Porto Alegre fue mutirão  celebrar y reflexionar juntos; en Busan fue madang, patio tradicional, un espacio de deliberación, celebración y comunidad. Y ahora en Karlsruhe es Brunnen, un pozo en el mercado.

Karlsruhe, una ciudad que fue construida sin muros hace más de trescientos años, abierta a amigos e invitados —en un tiempo en que otras ciudades aún se escondían detrás de fortificaciones—, acogió a visitantes de todo el mundo para la celebración de cuatro preasambleas que han presentado enérgicos llamados a la 11ª Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI). 

El tapiz de la “Cascada de solidaridad y resistencia” ha sido montado y se exhibe en el recinto de la 11^a Asamblea del CMI en Karlsruhe (Alemania).

Mientras repicaban las campanas por toda la ciudad de Karlsruhe (Alemania), miles de cristianos se reunieron el miércoles 31 de agosto en la carpa de oración situada en pleno corazón de la 11^a Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI). Representantes de cada una de las ocho regiones geográficas en las que trabaja el CMI aportaron los dones y preocupaciones que reflejaban su propio contexto cultural e histórico. La congregación internacional oró dando gracias a Dios y añadiendo su expectativa por los próximos nueve días de la Asamblea. “Compartimos la esperanza de fundirnos unos con otros en el cálido abrazo del amor de Cristo que nos lleva a la reconciliación y la unidad”.

Cuando los participantes en la Primera Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) se reunieron en Ámsterdam en agosto de 1948, los Países Bajos atestiguaban la violencia de la Segunda Guerra Mundial. El puerto de Róterdam resurgía de la casi destrucción. Muchas otras ciudades, pueblos y aldeas de toda Europa estaban luchando por recuperarse. Al este, Alemania y Austria estaban divididas en zonas de ocupación dirigidas por las potencias aliadas. Dos meses antes, las tensiones entre la Unión Soviética y los ocupantes occidentales de la antigua capital alemana dieron lugar al inicio del puente aéreo de Berlín. Desde 1945, las publicaciones han ido incrementando el uso del término "Guerra Fría".

Al tiempo que coloridos paneles viajaban desde Corea del Sur para ser incluidos en la Cascada de solidaridad y resistencia de la 11ª Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) en Karlsruhe, mujeres de Corea del Sur afirmaron que sentían el apoyo mundial.

Во время недавнего визита солидарности в Украину делегацию Всемирного совета церквей (ВСЦ) приняли в Банченском монастыре в Черновицкой области Украины, где члены делегации смогли убедиться в активной поддержке и предоставлении убежища жертвам продолжающейся войны России против Украины.

Durante la reciente visita de solidaridad a Ucrania, una delegación del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) fue recibida en el monasterio de Banchen, en la región ucraniana de Chernivtsi, y fue testigo de su participación activa prestando ayuda y proporcionando refugio a las víctimas de la actual guerra de Rusia contra Ucrania.

Los doce estudiantes que han obtenido el Certificado de Estudios Avanzados en Estudios Interreligiosos se graduaron el 21 de julio y celebraron seis semanas de crecimiento y aprendizaje conjunto.