Musulmanes y cristianos se reunieron en la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén el 27 de julio. Los unos junto a los otros por la paz justa en Tierra Santa. Después de casi dos semanas de tensiones, violencia y asesinatos en Jerusalén. Los encuentros entre los dirigentes de iglesias y los líderes islámicos en la explanada de la mezquita fueron aclamados por la comunidad incluso en medio de las bocanadas de gas lacrimógeno y el ocasional retumbo de los explosivos. El patriarca católico emérito Michel Sabbah, que debía encabezar la delegación cristiana, envió un mensaje después de que se le negara la entrada a través de la Puerta de los Leones.
28 Julio 2017