Cada mañana un hombre alegre y elocuente llega a su oficina de Jerusalén Oriental con, al menos, un atisbo de esperanza. Se trata del Dr. Bernard Sabella, que ha dedicado toda su vida a los derechos del pueblo palestino. En su trabajo como director ejecutivo del Departamento de Servicios a los Refugiados Palestinos (DSRP), se encuentra a diario con cuestiones que tienen que ver con la relación entre palestinos e israelíes. Al mismo tiempo, Sabella solo quiere ser un ciudadano corriente en el país donde él y su familia tienen sus raíces, sin que se le asocie constantemente con el conflicto palestino-israelí, que a veces siente que no hace justicia a su identidad como palestino.
12 Julio 2016