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“Me alegra saludarles en nombre del Consejo Mundial de Iglesias”, dijo Pillay. “El Consejo Mundial de Iglesias se fundó hace 75 años, justo después de la Segunda Guerra Mundial, con el propósito de unir a los cristianos para buscar juntos soluciones a los grandes problemas del mundo, centrándose, en particular, en cuestiones relativas a la justicia”.
Pillay encabeza una delegación en Colombia que aspira a transmitir el compromiso del CMI de acompañar y apoyar el proceso de paz del país.
“El Consejo Mundial de Iglesias trabaja en temas de paz en muchísimos países del mundo, y tenemos una larga historia de colaboración con Colombia”, afirmó Pillay ante el Senado colombiano. “Como Consejo Mundial de Iglesias, nos sentimos muy honrados de haber sido invitados por el Gobierno a formar parte del equipo facilitador que tiene por cometido trabajar en aras del proceso de paz”.
A principios de este año, el CMI, junto con la Conferencia Episcopal de Colombia, la Misión de las Naciones Unidas en Colombia y Organización de los Estados Americanos, fue designado acompañante permanente de la mesa redonda sobre la paz entre el Estado Mayor Central FARC-EP y el Gobierno colombiano.
“Agradecemos esta oportunidad. El Consejo Mundial de Iglesias desea caminar con ustedes y acompañarlos, de modo que podamos trabajar juntos por una paz total”, dijo Pillay al Senado colombiano.
