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Durante su participación en el Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), del 17 al 20 de enero, el Secretario General del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, instó a los líderes del mundo a rendir cuentas a la humanidad en aras de la justicia y la paz para todos.
“Hay nuevas formas de populismo polarizante que están generando divisiones más profundas en nuestro mundo y en nuestras sociedades” dijo el Rev. Tveit. “Estamos viendo un aumento del tribalismo, el nacionalismo, el racismo y la violencia. Las causas profundas de estas tendencias residen a menudo en los efectos negativos de la globalización económica –o de su antítesis, el proteccionismo económico; la desigualdad y la exclusión– que dejan cada vez a más personas marginadas y olvidadas, y están abriendo brechas cada vez más profundas entre ricos y pobres”.
El tema del Foro este año es “Liderazgo responsable y receptivo” y, a ese respecto, el Rev. Tveit planteó la siguiente pregunta: ¿quién se queda atrás?
“Calmar los miedos de un grupo alimentando los miedos de otro no puede ser la solución”, dijo el Secretario General del CMI. “Estos desafíos requieren un liderazgo responsable ante la humanidad entera y una, en aras de la justicia y la paz para todos. Las verdaderas relaciones responsables, no solo con los propietarios, sino también con los empleados, son imprescindibles en una actividad empresarial sana”.
El liderazgo mundial responsable de hoy implica una rendición de cuentas mucho más amplia, continuó diciendo el Rev. Tveit. “Los beneficios económicos deben proporcionar los recursos para ofrecer educación, empleo, salud y un medio ambiente saludable para todos. Los impuestos son recursos comunes necesarios para el desarrollo sostenible de una sociedad, y su pago no debe eludirse ni evitarse”, dijo. “En un horizonte más amplio de responsabilidad mutua para con la humanidad y para con el futuro de este único planeta Tierra, las soluciones que podremos encontrar serán mucho mejores si estamos juntos, no separados”.
Un liderazgo responsable resulta especialmente importante ahora, dijo el Rev. Tveit. “Todos los líderes de todos los sectores tienen que definir y encarnar un liderazgo basado en la responsabilidad mutua entre ellos para hacer frente a los retos de hoy y de mañana. Un liderazgo responsable no se puede construir sobre medias verdades ni puede esperar a que las verdades sean incuestionables”.
Ser responsable ante Dios significa ser responsable ante todos aquellos creados a imagen y semejanza de Dios, añadió.
Mientras el mundo se enfrenta a graves problemas relacionados con el cambio climático, la violencia contra los niños y los actos de terrorismo, los verdaderos líderes del mundo necesitan de la sabiduría de unos y otros, compartida mediante un diálogo abierto e incluso crítico que no atienda a intereses ni fronteras. “Comprometerse con una visión de inclusión y de responsabilidad mutua es un reto para todos, sea cual sea nuestro sector”, dijo Tveit.
“Pero esto es lo que se requiere de los dirigentes mundiales de nuestro tiempo. Tenemos que sembrar esperanza para todos, no solo para nuestros propios intereses o para los de las empresas, grupos específicos o naciones concretas”.
Discurso completo del Rev. Dr. Olav Fykse Tveit (en inglés)
