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“Vine aquí para saber la diferencia entre el VIH y el SIDA, y para discernir el papel que tienen las mujeres, especialmente las pastoras, en la formación, la capacitación y la difusión de información entre las personas de sus congregaciones sobre sus perspectivas con respecto al VIH”, explicó la Rev. Mary Ann Kadile, pastora de la Iglesia Unida de Cristo en Filipinas.

Viajó desde Mindanao hasta la ciudad de San Pablo, en la provincial de Laguna, para participar en un taller sobre el VIH organizado por el Consejo Nacional de Iglesias de Filipinas (NCCP).

La Rev. Kadile fue una de las 26 mujeres de todo el país que participaron en el taller. Entre ellas, había líderes religiosas, laicas, teólogas y seminaristas de las iglesias miembros del NCCP, algunas de las cuales viven con el VIH.

“En respuesta a la rápida y continua propagación del VIH y el SIDA en Filipinas, el programa dedicado al VIH/SIDA del NCCP, junto con el programa dedicado a las mujeres, sigue creando oportunidades y espacios de formación y educación integral para preparar a las iglesias para abordar esta alarmante situación”, declaró Darlene Marquez-Caramanzana, directora del programa del NCCP para la educación ecuménica y la alimentación de la fe.

La Rev. Pauline Wanjiru Njiru, coordinadora regional para el África Oriental de las Iniciativas Ecuménicas y Acción Mundial sobre el VIH/SIDA del Consejo Mundial de Iglesias, facilitó sesiones sobre estudio bíblico contextual.

El Rev. J.P. Mokgethi-Heath, director de promoción y relaciones con los asociados de INERELA+ (Red internacional de líderes religiosos que viven con el VIH y el SIDA o están personalmente afectados por el virus) y miembro de la Iglesia de Suecia, dirigió talleres sobre el enfoque SAVE (prácticas más seguras, acceso al tratamiento, asesoramiento y pruebas voluntarias, empoderamiento) y  el modelo contra el estigma, la vergüenza, la negación, la discriminación, la inacción y las medidas inadecuadas (SSDDIM, por su sigla en inglés) para la prevención y el tratamiento del VIH y el SIDA.

El estudio bíblico contextual y el enfoque SAVE

“Los aspectos más importantes de la participación en actividades sobre el VIH son la información acertada (prevención, tratamiento, asistencia y apoyo), abordando el tema del estigma y la discriminación, e identificar y abordar los factores de vulnerabilidad asociados con el VIH. La mayoría de las veces, estos factores van de la mano de la exclusión y la marginación. Esto también se aplica a las comunidades religiosas; es más: las estructuras de poder patriarcal omnipresentes y sus enseñanzas en el cristianismo y en otras religiones alimentan este paradigma”, apuntó el Rev. Heath, hablando sobre el enfoque SAVE.

Para profundizar en el entendimiento de estos factores de vulnerabilidad, se utilizó el modelo del estudio bíblico contextual. El estudio bíblico contextual fue desarrollado por el Centro Ujaama de Investigación y Desarrollo Comunitario como iniciativa de la Universidad de Kwazulu-Natal, en Sudáfrica, para abordar la cuestión de la violencia sexual y de género desde la perspectiva de la comunidad religiosa.

La Rev. Njiru afirmó “es necesario señalar la manera en la que las mujeres de la Biblia no solo desafiaron los poderes de su tiempo, sino que recibieron también el firme respaldo de Jesús para ser quienes eran de verdad. A pesar de haber sido violada por su hermano, Tamar no guardó silencio; a pesar de que la mujer samaritana que se encontró con Jesús junto al pozo estaba estigmatizada, entró en relación con Jesús, y Jesús, con ella; a pesar de que los discípulos de Jesús le alentaron a echar de allí a la mujer que le ungía los pies, Jesús la alaba por ello y habla de su ejemplo de servicio como algo que recordar cada vez que se le recuerde a Él. Las mujeres tienen un papel prominente en el ministerio de Jesús, al cual le faltaría un elemento esencial sin el ministerio de las mujeres”.

El Rev. Heath añadió que el uso de estas dos disciplinas, estas dos metodologías combinadas, sirvió para reforzar el contenido y el impacto del taller. “Durante la sesión de clausura que tuvo lugar tras el taller, todos y cada uno de los participantes mencionaron no solo en qué medida les habían interpelado y conmovido personalmente las sesiones, sino también acerca del compromiso que deseaban adquirir con el grupo para seguir trabajando en las distintas áreas principales.

Una futura pastora de la Iglesia Metodista Unida afirmó que el estudio bíblico contextual ha representado para ella la apertura de un nuevo camino para estudiar y entender la Biblia, y que también puede aplicar este aprendizaje amando más y convirtiéndose en una persona más tolerante. El enfoque SAVE propone maneras concretas para que las mujeres de la comunidad religiosa contribuyan a prevenir la propagación del VIH y el SIDA en su país, y ayuda a las mujeres líderes religiosas a comprender que el VIH y el SIDA son cuestiones que revisten una mayor complejidad que otras afecciones médicas.

Para concluir, la Rev. Kadile afirmó: “puedo promover las pruebas diagnósticas del VIH entre hombres y mujeres. Puedo ser más compasiva y comprensiva con las personas que viven con el VlH, e invitar a mi congregación a que haga lo mismo. Puedo enseñar a las organizaciones de la juventud a protegerse y a no discriminar a las personas que viven con el VIH. Quiero colaborar con el NCCP para promover la causa de #PreventionNOTCondemnation (prevención y no condena).

Iniciativas Ecuménicas y Acción Mundial sobre el VIH/SIDA del Consejo Mundial de Iglesias