La situación de la población de Myanmar –que incluye a más de un millón de personas de etnia rohingya– es cada vez más preocupante, expresó el Comité Central del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) en una declaración pública.
La situation des habitants du Myanmar - dont plus d'un million de Rohingyas - est de plus en plus préoccupante, a exprimé le Comité central du Conseil œcuménique des Eglises (COE) dans une déclaration publique.
Acogiendo con beneplácito unas elecciones "ampliamente reconocidas como mayormente libres y limpias", el Comité Ejecutivo del Consejo Mundial de Iglesias se ha unido a "las iglesias y a todo el pueblo de Myanmar para celebrar un proceso electoral que se ha desarrollado y completado satisfactoria y pacíficamente". El mensaje fue emitido durante la reunión del Comité Ejecutivo que tuvo lugar del 13 al 18 noviembre en Ginebra, Suiza.
Saluant une élection «grandement reconnue comme libre et juste», le Comité exécutif du COE s’est joint «aux Églises et au peuple du Myanmar pour célébrer le processus électoral mené et conclu avec succès et dans la paix».
Profundamente preocupado por la situación de los migrantes en muchas regiones y, en particular, por la de aquellos “obligados a emprender viajes desesperados llenos de riesgos y peligros”, el Comité Ejecutivo del CMI declaró que “todos los miembros de la comunidad internacional tienen el deber moral y legal de salvar las vidas de aquellos que están en peligro, sea en el mar o durante su tránsito, independientemente de su origen o condición”.
Profondément inquiet pour les migrants dans de nombreuses régions du monde, en particulier ceux qui «sont motivés à entreprendre des périples désespérément risqués et dangereux», le Comité exécutif du COE a déclaré: «Tous les membres de la communauté internationale ont une obligation morale et légale de sauver la vie des personnes en danger en mer ou en transit, quels que soient leur origine ou leur statut.»