Después de consagrar sábado y domingo a deliberaciones en grupos y comisiones, este lunes los miembros del Comité Central comenzarán a tomar decisiones estratégicas para la vida del Consejo Mundial de Iglesias.

Entre las propuestas más significativas está la nueva organización programática del Consejo, resultado de las recomendaciones adoptadas en la asamblea general de Porto Alegre. También la creación de un organismo especial de juventud en el seno del Consejo, para responder a encomiendas de esa misma asamblea en favor de una mayor participación de los jóvenes en el trabajo del Consejo.

Los miembros del comité central debatirán y tomarán partido sobre varios temas de actualidad que afectan a países como Uganda, Sri Lanka, Filipinas, Kosovo y Líbano.

El lunes será la ocasión para una conmemoración especial: los cuarenta años desde la realización de la Conferencia Mundial sobre Iglesia y Sociedad celebrada en Ginebra en 1966. Para muchos, esa conferencia y la subsiguiente asamblea general del CMI en Uppsala (1968) marcaron un cambio de rumbo en el movimiento ecuménico, colocando en primer plano el tema de la justicia y la solidaridad con los oprimidos.