placeholder image

La sentencia judicial que ordena en Sudán la flagelación y la pena de muerte para Meriam Yehia Ibrahim Ishag ha suscitado la expresión de la profunda preocupación del Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), que ha instado al presidente Omar Hassan Ahmad al-Bashir a  intervenir para «evitar el cumplimiento de esta sentencia injusta e inadmisible».

Meriam Yehia Ibrahim Ishag, una mujer sudanesa de 27 años, ha sido acusada de convertirse del islam al cristianismo y de haber cometido adulterio al casarse con un hombre cristiano, según los medios de comunicación.

En su carta al presidente Omar Hassan Ahmad al-Bashir, enviada el 23 de mayo, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit expresó su consternación por la decisión del tribunal. «Ya fueran los padres de la Sra. Meriam Yehia Ibrahim Ishag cristianos o musulmanes, esta sentencia va en contra de la letra y el espíritu de la Constitución sudanesa», afirmó. Añadió que, según la Constitución sudanesa, todos los ciudadanos tienen «derecho a la libertad de credo y culto».

El Rev. Dr. Olav Fykse Tveit declaró que condenar a Meriam Yehia Ibrahim Ishag viola un principio fundamental del derecho internacional en materia de derechos humanos recogido en la propia Constitución de Sudán.

Leer el texto completo de la carta del secretario general del CMI (en inglés)

Declaración de prensa de la Provincia Interna de la Iglesia Episcopal de Sudán (en inglés)

Iglesias miembros del CMI en Sudán