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Ginebra, 11 de julio de 2020: En una carta dirigida a Su Excelencia Recep Tayyip Erdogan, presidente de la República de Turquía, el secretario general interino del Consejo Mundial de Iglesias, el Rev. Prof. Dr. Ioan Sauca, trasmite sus oraciones y su ferviente esperanza de que la basílica de Santa Sofía no vuelva a ser un foco de confrontación y conflicto, y que retome la emblemática función unificadora que ha tenido desde 1934.

Lea el mensaje completo

Estimado presidente:

Desde que comenzara a funcionar como museo, en 1934, la Iglesia de Santa Sofía ha sido un lugar de apertura, encuentro e inspiración para personas de todas las naciones y credos, y una poderosa expresión del compromiso de la República de Turquía con la secularidad y la inclusión y de su deseo de dejar atrás los conflictos del pasado.

Hoy, sin embargo, me veo obligado a transmitirle el dolor y la consternación que su reciente decisión ha provocado en el Consejo Mundial de Iglesias, y en sus trescientas cincuenta iglesias miembros de más de ciento diez países, las cuales representan a más de quinientos millones de cristianos de todo el mundo. Al optar por reconvertir la iglesia de Santa Sofía en una mezquita, revierte usted esa señal positiva de la apertura de Turquía para convertirla en una señal de exclusión y división. Lamentablemente, esta decisión ha sido adoptada además sin previa notificación a la UNESCO y sin abordar con esta las consecuencias de este cambio en el valor universal de la basílica, reconocido bajo la Convención del Patrimonio Mundial.

Durante muchos años, el Consejo Mundial de Iglesias ha desplegado grandes esfuerzos para apoyar la participación activa de sus iglesias miembros en el diálogo interreligioso, a fin de tender puentes de respeto mutuo y de cooperación cimentados en los valores compartidos entre las diferentes comunidades religiosas. Además, en tiempos difíciles, el CMI y sus iglesias miembros han defendido y apoyado los derechos y la integridad de otras comunidades religiosas, entre ellas las comunidades musulmanas. La decisión de anular la condición de museo de un lugar tan emblemático como la Iglesia de Santa Sofía, y de reconvertirla en mezquita, creará inevitablemente incertidumbre, sospechas y desconfianza, y socavará todos nuestros esfuerzos por reunir a personas de diferentes religiones en torno a la mesa del diálogo y la cooperación. Mucho nos tememos, además, que su decisión alentará las aspiraciones de ciertos grupos en otros lugares que buscan derrocar el statu quo existente y promover nuevas divisiones entre las comunidades religiosas.

Señor presidente, usted ha afirmado en múltiples ocasiones la identidad de la Turquía moderna como estado laico, pero ayer revocó un compromiso que desde 1934 ha mantenido este monumento histórico en calidad de patrimonio común de la humanidad. En aras de promover la comprensión mutua, el respeto, el diálogo y la cooperación, y de evitar alimentar antiguas animosidades y divisiones, le pedimos urgentemente que reconsidere y revierta su decisión.

Nos unimos a Su Toda Santidad el patriarca ecuménico Bartolomé en la expresión de nuestras fervientes oraciones y esperanzas de que la Iglesia de Santa Sofía no se convierta de nuevo en un foco de confrontación y conflicto, y se restablezca la emblemática función unificadora que ha tenido desde 1934.

Atentamente,

Rev. Ioan Sauca
Secretario General Interino del CMI
Consejo Mundial de Iglesias

Carta del CMI a Su Excelencia Recep Tayyip Erdogan, presidente de la República de Turquía