Ante la situación de continua tensión y conflicto en la península de Corea que amenaza la paz y la seguridad del pueblo coreano, el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) llamó a sus iglesias miembros a participar en la campaña “Una luz de paz” durante el Adviento.
Al tiempo que celebra las nuevas medidas adoptadas para la eliminación de las armas nucleares a nivel mundial, el Comité Ejecutivo del Consejo Mundial de Iglesias también teme que el ciclo de confrontación en la península de Corea pueda convertirse en una guerra nuclear.
Durante su reunión en Ammán (Jordania), del 17 al 23 de noviembre, el comité ejecutivo del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) emitió una declaración sobre la detención del obispo Carlos Morales y sobre la situación en Mindanao (Filipinas).
En su discurso inaugural en Yangón (Myanmar) el pasado domingo, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del CMI, elogió a la Conferencia Cristiana de Asia (CCA) por su larga trayectoria de compromiso con el ecumenismo y la misión, y por sus esfuerzos para unir a las iglesias cristianas del continente.
Más de quinientos participantes de todo el mundo se reunieron esta mañana para la inauguración de la Conferencia Misionera de Asia en Yangón (Myanmar). La conferencia –la cuarta de este tipo que se celebra desde la creación de la Conferencia Cristiana de Asia (CCA) en 1957– ofrece la importante oportunidad de reunir a las iglesias, las organizaciones religiosas y los asociados para reflexionar sobre la misión en el contexto asiático.
“El mundo debe escuchar al pueblo de Corea: no quiere guerra, quiere paz”. Así lo expresó el Rev. Frank Chikane, moderador de la Comisión de las Iglesias para Asuntos Internacionales del CMI, reflejando la opinión de varias docenas de personas de todo el mundo que asistieron, el 5 de octubre, a una videoconferencia sobre la crisis de Corea.
Unos cuarenta profesionales encargados de las relaciones ecuménicas en diferentes iglesias miembros de África, Asia, el Caribe, Europa, Oriente Medio y América del Norte y del Sur están reunidos en Ginebra (Suiza). Su reunión de cuatro días les brinda la oportunidad de aprender los unos de los otros y de conocer los distintos programas del CMI.
Este profesor de Sociología de 78 años, nombrado recientemente presidente de la Cruz Roja Coreana (del Sur), tuvo su primer contacto con el Norte dividido mientras trabajaba en el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) en Ginebra, donde sirvió más de diecisiete años hasta 1999.
En vista de que los recientes progresos en el desarrollo de las armas nucleares y el aumento de las tensiones entre Estados Unidos y Corea del Norte pueden llevar al mundo al borde de una guerra, las iglesias de todo el mundo llaman al diálogo bilateral y expresan su compromiso con la paz y la resolución no violenta de los conflictos.
Un nuevo tratado para prohibir las armas nucleares, cuyo texto ha sido negociado y aprobado por la gran mayoría de los Gobiernos, ofrece motivos de esperanza al mundo en el 72 aniversario de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki.
El 13 de agosto, iglesias de todo el mundo están invitadas a mostrar su solidaridad con las iglesias coreanas uniéndose al “Domingo de oración por la reunificación pacífica de la península coreana”.
En un emotivo culto celebrado el 8 de julio en la Iglesia Betania de Leipzig (Alemania), un pastor de Corea del Norte y un pastor de Corea del Sur presidieron conjuntamente la sagrada comunión, poniendo fin a una reunión que subrayó la necesidad de formular respuestas ecuménicas urgentes ante la peligrosa escalada de las tensiones en la península de Corea.
Al término de un foro para la paz en la península de Corea convocado por el Consejo Mundial de Iglesias (CMI), los participantes, venidos de todo el mundo en representación de muchas iglesias, se comprometieron a trabajar juntos para acompañar a los cristianos de Corea del Norte y del Sur en sus esfuerzos por la paz, la reconciliación y el desarrollo.
El viernes por la tarde, cuando los líderes de los Estados del G20 se reúnan en Hamburgo para debatir asuntos económicos, sociales, medioambientales y políticos mundiales, las iglesias de Alemania invitan a los habitantes de Alemania y del mundo entero a una oración común por la paz.
“Ante el aumento de la confrontación y el mayor riesgo de un conflicto catastrófico” en la península de Corea, el Consejo Mundial de Iglesias ha insistido en que “se necesita urgentemente un cambio de paradigma en los enfoques para resolver los desafíos geopolíticos de la región”.
El 30 de mayo de 2017, una delegación liderada por el secretario general del CMI, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, se reunió con el presidente de la República de Corea, Moon Jae-in, que tomó posesión de su cargo el 10 de mayo de 2017.
Estamos muy lejos de hacer lo suficiente para salvar las vidas de los 20 millones de personas que padecen hambruna en Yemen, Somalia, Sudán del Sur y Nigeria. Entre ellos están 1,4 millones de niños, que están expuestos al riesgo inminente de muerte a menos que reciban ayuda inmediatamente.
Dieciocho teólogas africanas y asiáticas emprendieron un viaje de reflexión y acción en torno al tema de “La orientación de las mujeres en el liderazgo ecuménico”, en una consulta que tuvo lugar del 20 al 22 de abril en Bangkok (Tailandia). La reunión fue organizada por el departamento de Educación Teológica Ecuménica del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y contó con el apoyo de la Fundación para la Educación Teológica de Asia Sudoriental.
El CMI se unió al Consejo Nacional de Iglesias de Corea del Sur (NCCK) para expresar su profunda preocupación por el redespliegue del portaaviones USS Carl Vinson y su grupo de combate en los mares que rodean la península de Corea.
El Consejo Nacional de Iglesias de Corea y la Federación Cristiana Coreana han trabajado juntos para preparar la “Oración conjunta de Corea del Norte y Corea del Sur para la Pascua de 2017”.