Apertura

Nuestros corazones se alzan con esperanza y alegría,
al celebrar setenta años
de relaciones ecuménicas.
Los dones que hemos recibido los unos de los otros,
hayan sido fáciles o costosos,
dan testimonio de tu inspiración, oh, Dios.

Año tras año, nos has llamado a ser creativos,
oh, Dios, nuestro Padre amoroso,
y a vivir con la valentía de Cristo
y la sabiduría del Espíritu Santo.
Gracias a ti, oh, Dios.

Lamento

Incluso al celebrar estos setenta años juntos,
reconocemos nuestra humanidad, oh, Dios.
Sabemos que ha habido muchos momentos
en que hemos dejado de ser fieles
al sueño de nuestra unidad en ti.

No siempre hemos aceptado
los dones que se encuentran en nuestros diferentes caminos
o en las impresiones que podríamos compartir.
Nos hemos dejado tentar
por el poder y las realidades de nuestras historias,
en lugar de dejarnos tentar por la maravilla de la nueva vida
juntos.

Perdónanos, Dios de amor,
y llámanos para que caminemos de verdad a tu lado.
Te lo pedimos con esperanza y fe.
Amén.

El perdón

Dios, en Cristo Jesús, nos mantiene en el amor
y nos guiará hacia un nuevo viaje juntos
y un futuro lleno de esperanza.
¡Somos perdonados!
Gracias a Dios.

Intercesión

Oh Dios, tú que nos aceptas comprensivamente,
invita en nosotros tus dones sagrados para ofrecérnoslos mutuamente.
Llévanos hacia las profundidades de los sueños
que nos recuerden nuevas relaciones creativas,
más allá de donde hemos estado antes.

Crea en nosotros niveles de humildad
que abran nuestros corazones al anhelo de nuevas ideas
que podamos compartir entre nosotros.
Haz que aprendamos formas de abrirnos a las verdades
que se han ocultado en nuestras historias
y en la competencia entre los miembros
de nuestras variadas comunidades.

Eleva nuestras vidas para que nos centremos
en el mundo que nos rodea,
dando una nueva prioridad a todo
aquello que pueda aportar amor, justicia y verdad
al futuro juntos
y que pueda ofrecerse a todas las personas.

Quédate a nuestro lado, oh, Dios,
para que podamos ser tu pueblo
en todo lo que hacemos juntos.
Te lo pedimos con fe,
en este día y todos los días.
Amén.

Afirmación de la fe

Dios misericordioso,
creemos en la maravilla de la vida en ti.
En todo momento, sabemos que
nos llamas a la creatividad y a la esperanza,
sin nunca abandonarnos, a nosotros, tu iglesia.

Cristo Jesús, celebramos
que has viajado con nosotros
durante estos 70 años juntos,
que nunca nos dejas solos en nuestra humanidad
y que nos invitas a
la plenitud de la vida común.

Santo Espíritu de sabiduría,
estamos seguros de que serás descubierto
en lugares inesperados que nos rodean,
tu brillante vida emerge ante nosotros
y nos inspira a creer
que somos parte de tu poder
para dirigir al mundo
hacia tu bondad y tu gracia.
Eso creemos, oh, Dios.
Amén.

Bendición

Que Dios, el gran creador,
siga creando dentro de nosotros,
que Cristo Jesús sea nuestra compañía
y que el Espíritu Santo nos rodee
con gracia eterna.
Amén.

(Dorothy McRae-McMahon, ministra jubilada de la Iglesia Unitaria Australiana, exdirectora nacional de la Misión de la Iglesia Unida en Australia (1993). Fue la primera mujer en convertirse en moderadora del Comité de culto del Consejo Mundial de Iglesias (Asamblea de  Canberra)).