Image
El papa Francisco saluda al Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del CMI, durante su visita a Roma para participar en una reunión sobre la lucha contra el racismo y la xenofobia. Foto: Xanthi Morfi/CMI

El papa Francisco saluda al Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del CMI, durante su visita a Roma para participar en una reunión sobre la lucha contra el racismo y la xenofobia. Foto: Xanthi Morfi/CMI

El papa Francisco se reunió el 20 de septiembre con los dirigentes de diversas iglesias que participaban en una reunión en Roma sobre la lucha contra el racismo y la xenofobia. Durante la audiencia, el papa dijo que esperaba que esta conferencia diera lugar a muchas otras iniciativas conjuntas de este tipo.

El papa saludó personalmente a cada participante en la conferencia mundial sobre el tema “Xenofobia, racismo y nacionalismo populista en el contexto de las migraciones mundiales”. La reunión de tres días de duración fue organizada conjuntamente por el Consejo Mundial de Iglesias y el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, en colaboración con el Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos.

El pontífice dijo a los líderes religiosos que vivimos tiempos en los que los “sentimientos de sospecha, de miedo, desprecio y hasta de odio” frente a quienes son considerados diferentes a causa de su origen étnico, nacional o religioso parecen reavivarse, inspirando actos de intolerancia, discriminación y exclusión.

Los políticos, afirmó, ceden a la tentación de explotar estos temores y de usarlos para “intereses electorales miopes”.

Ante la gravedad de estos fenómenos, no podemos permanecer indiferentes, aseveró el papa. “Estamos llamados, en nuestras respectivas funciones, a cultivar y promover el respeto de la dignidad inherente a toda persona humana”, en primer lugar en nuestras familias, donde aprendemos los valores de compartir y de la hospitalidad, pero también en los diversos contextos sociales en los que vivimos y trabajamos.

El papa destacó la responsabilidad de las escuelas y las universidades, así como de quienes trabajan en los medios de comunicación, a la hora de promover una cultura del encuentro, la apertura y el respeto por la diversidad. Los líderes de todas las religiones, dijo, “tienen una importante misión: difundir entre sus fieles los principios y valores éticos grabados por Dios en el corazón humano”.

En particular, observó, las iglesias cristianas tienen la responsabilidad moral de ser testigos del amor de Cristo y de nuestro origen común en el Creador, que nos hace a todos miembros de una única familia.

De esta manera, concluyó el papa Francisco, podemos contribuir a construir una sociedad basada en los valores de la sacralidad de la vida humana, la solidaridad y el respeto por la dignidad de cada persona.

Mensaje de la conferencia sobre “Xenofobia, racismo y nacionalismo populista en el contexto de las migraciones mundiales” (en inglés)

Discurso del papa Francisco a los participantes en la conferencia (en italiano)

Fotos de la conferencia