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  Olav Fykse Tveit en el culto celebrado en la Iglesia de la Trinidad. ©Albin Hillert/CMI

Olav Fykse Tveit en el culto celebrado en la Iglesia de la Trinidad. ©Albin Hillert/CMI

En su sermón en la Iglesia de la Trinidad, en Oslo (Noruega) el 9 de diciembre, el secretario general del Consejo Mundial de Iglesias, Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, reflexionó sobre los pacificadores: los que crean confianza y fomentan buenas relaciones; los que intentan sacar lo mejor de nosotros; los que tratan de resolver los conflictos.

"La paz es bienestar, salud, felicidad, y vida,” afirmó. “Necesitamos paz para vivir en comunidad. Está dentro de lo que pedimos cuando oramos por nuestro "pan de cada día". Se trata de dedicar la vida a una gran y necesaria misión: proteger nuestra paz, actuar de manera que nos permita ser uno, aunque seamos diferentes".

El sermón del Rev. Tveit fue parte de un culto ecuménico por la paz que se llevó a cabo el mismo fin de semana en el que se celebraba en Oslo la ceremonia de entrega del Premio Nobel. La congregación incluyó a representantes de iglesias en Noruega, así como de la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN), galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2017.

La obispa presidenta de la Iglesia de Noruega, Helga Haugland Byfuglien, y el secretario general de la Iglesia de la Convención Misionera de Noruega, Øyvind Haraldseid, oficiaron la liturgia.

En su sermón, el Rev. Tveit afirmó que todos podemos contribuir al establecimiento de la paz. “Necesitamos estímulos como el premio de la paz de este año para darnos cuenta de que es posible. Es posible para ICAN, y es posible para todos nosotros”.

“Todos necesitamos la paz", continuó. “La necesitamos en nuestras relaciones más cercanas, en el contexto local, nacional y mundial; entre los diversos grupos y pueblos, entre los diversos grupos étnicos y razas, y entre las diversas religiones y convicciones. Necesitamos palabras que puedan unirnos. Necesitamos palabras que pueden establecer normas y acuerdos sobre cómo deben ser las cosas, aunque las cosas no sean así o, al menos, no lo sean todavía". “El mundo necesita acuerdos internacionales, pero no cuando por fin estemos todos de acuerdo y todos los problemas están resueltos. Los necesitamos ahora”, reflexionó.

“Todas las naciones pueden contribuir a la creación de un mundo sin armas nucleares. La supervivencia del más fuerte no es la única manera de funcionar que debe prevalecer: se deben intentar distintos caminos hacia la paz", concluyó.

Kiriaki P. Samuelsen (Sociedad Ortodoxa Griega), Hanne Hognerstad (cuáqueros) y Guillermo Cochrane (Ejército de Salvación) participaron en el culto, junto con muchos otros líderes de las iglesias. La música fue dirigida por Ulf Nilsen.

En el culto, hubo un momento para escuchar, un momento para orar por la paz, y un momento para recibir saludos de Linnet Ng'ayu, del Consejo Africano de Líderes Religiosos (Religiones por la Paz), que también forma parte de la junta internacional de ICAN.

Los miembros de la congregación oraron juntos recitando los siguientes versos:

"El terror y las lágrimas, las heridas sin sanar, los corazones sin sentimientos reflejan nuestros tormentos: la vida sin confianza, lo costoso y la avaricia, los conflictos y las crisis nos reducen a cenizas”

Y prosiguieron: "Dios, en tu gracia; Dios, en tu misericordia, condúcenos hacia ti para transformar el mundo”.

Lea el sermón completo del secretario general del CMI, Rev. Dr. Olav Fykse Tveit (en inglés)

El CMI felicita al premio Nobel de la Paz, ICAN (Comunicado de prensa del CMI del 6 de octubre de 2017)

Fotografías gratuitas de alta resolución del culto celebrado en Oslo

Contactos para los medios de comunicación:

Directora de comunicación del CMI, Marianne Ejdersten: [email protected], +41 79 507 63 63

Contacto en Noruega: directora de comunicación de la Iglesia de Noruega, Ingeborg Dybvig: [email protected], +47 474 81 606