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El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) está poniendo a disposición recursos para ayudar a la comunidad del CMI a celebrar el 30º aniversario de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, un tratado de derechos humanos que establece los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y sanitarios y culturales de los niños.
En una carta a la comunidad del CMI, el secretario general del CMI, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, celebró este hito en el ámbito de la infancia y la adolescencia. “Al adoptar la Convención sobre los Derechos del Niño, el 20 de noviembre de 1989, los líderes mundiales hicieron la promesa de proteger a todos los niños y de hacer respetar sus derechos”, escribió el Rev. Tveit. “Las iglesias tuvieron un papel muy importante”.
De hecho, las ideas cristianas sobre la dignidad y la igualdad humanas han tenido una gran influencia en la formulación del concepto de los derechos humanos y de los instrumentos de las Naciones Unidas, continuó Tveit. “Pero los compromisos adquiridos en 1989 solo se cumplirán cuando cada gobierno y cada ciudadano defienda los derechos de la niñez, y cuando todos los niños puedan reclamar sus derechos”, escribió. “Por ello, les animo a todos a celebrar el 20 de noviembre de este año organizando eventos especiales para los niños y emprendiendo iniciativas de sensibilización”.
Este aniversario tiene lugar en un momento de la historia en que millones de niños de todo el mundo se están manifestando pacíficamente en las calles, exigiendo a los adultos que cambien los sistemas económicos y sociales de manera que sean capaces de preservar la Creación de Dios y proteger su futuro, escribió Tveit. “Los niños y jóvenes de hoy se han convertido en las voces proféticas del problema que más profundamente los afecta: la supervivencia del planeta y de su población”, dice la carta.
Se están poniendo a disposición de la comunidad mundial enlaces a recursos para ayudar a las iglesias a cambiar sus actividades y el comportamiento de los consumidores, a desinvertir en los combustibles fósiles, a medir su huella ecológica y a promover la obtención de certificaciones ecológicas. “Solo los cambios concretos que hagamos todos nosotros pueden apaciguar la ecoansiedad que se está extendiendo entre los niños y adolescentes, como una forma grave de violencia psicológica”, concluye Tveit. “Los niños necesitan un mundo reconciliado y tienen derecho a la esperanza”.
Compromisos de las iglesias con la niñez
https://www.oikoumene.org/es/nuestra-labor/derechos-del-nino?set_language=es
