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Mesa redonda sobre la relación entre el CMI y los Focolari. Foto: Camille Vianin/CMI

Mesa redonda sobre la relación entre el CMI y los Focolari. Foto: Camille Vianin/CMI

¡Basta amare! Ese es el mensaje central de Chiara Lubich para la unidad; un mensaje lleno de esperanza y respeto por la labor del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) hacia la justicia y la paz.

El 18 de abril, más de 160 personas asistieron al evento conjunto del CMI y de los Focolari, inaugurado por el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del CMI, y por el padre Jesús Morán, copresidente del movimiento Focolari.

El Rev. Tveit reconoció la importancia de la cooperación y del apoyo mutuo entre el CMI y los Focolari para trabajar juntos por la justicia y la paz. “Estamos avanzando juntos en un mundo quebrantado y polarizado, pero también estamos avanzando hacia un compromiso más profundo para con nuestro trabajo por la unidad. La unidad de los pueblos y de las naciones, pero, en muchos aspectos, también la unidad de la iglesia, deben consolidarse como parte de las sociedades multiculturales y multirreligiosas”.

El Rev. concluyó diciendo: “Ya no seremos extraños, sino peregrinos que recorren juntos el camino, testigos de la venida del reino de la justicia y la paz de Dios”.

El padre Morán dijo que el diálogo es la base de una verdadera espiritualidad de unidad. “En el diálogo, cada persona se completa con el don del otro. Nos necesitamos los unos a los otros para ser nosotros mismos. En el diálogo, me entrego a mí mismo, entrego mi diversidad al otro. El verdadero diálogo es existencial porque nos exponemos a nosotros mismos, nuestra visión, nuestra identidad cultural y eclesial, pero no las perderemos, sino que en esa apertura se enriquecerán”.

Y concluyó diciendo: “Las personas que dialogan son las que escriben la historia”.

Teny Pirri-Simonian, exmiembro del personal de Relaciones eclesiales y ecuménicas del CMI, y cosecretaria del Grupo mixto de trabajo del CMI y la Iglesia Católica Romana, compartió su experiencia personal con Chiara Lubich y el movimiento Focolari: “Chiara compartía mi compromiso personal con el ‘amor puro y duro’ como el camino hacia la unidad. La compasión no tiene sentido a menos que vaya acompañada de introspección, diálogo y respeto por los demás”.

El padre Ioan Sauca, secretario general adjunto del CMI y director del Instituto Ecuménico de Bossey, compartió sus reflexiones sobre la charla sobre la espiritualidad de la unidad que Chiara Lubich dio en 2002 con motivo de su visita a Bossey.

Sauca dijo: “Era 100% católica romana, pero una católica romana que estaba abierta a los demás. No abandonó su identidad católica, pero sus encuentros con otras personas se basaban en el diálogo y la comunión. Su ecumenismo era una identidad clara, abierta a discutir con otras identidades claras”.

El Rev. Dr. Callan Slipper, sacerdote anglicano y miembro del movimiento Focolari, recordó que los Focolari no son un movimiento presente en una sola iglesia. “Vivimos un ecumenismo de las personas, un ecumenismo vivo, un diálogo de vida”.

También él recordó a Lubich: “Su disciplina espiritual no solo nos exhorta a vivir en unidad; sino que nos indica cómo vivirla. Nos muestra cómo entrar en la profundidad mística del evangelio de San Juan (17, 21): ‘para que todos sean uno’”.

Luzia-Tersa Wehrle, exmiembro del personal del CMI y miembro del movimient Focolari, habló de una conversación que tuvo con Lubich sobre su misión como Focolarina que trabajaba en el CMI. “Yo estaba entusiasmada por poder contribuir a la misión del CMI, y pensaba que al vivir esa espiritualidad de la unidad, y compartirla, pronto se cumpliría el sueño de ser uno en el movimiento ecuménico”.

Lubich le había dicho: “Basta amare”: todo lo que necesitas es ‘amar’, amar a Jesús en cada persona...”.

La tarde terminó en la Capilla Ecuménica con oraciones y canciones preparadas por 80 jóvenes del Centro de Formación de Montet (Suiza). En el momento central del servicio, los participantes rezaron con las palabras de Lubich: “Prende en todos nosotros un gran respeto fraterno, ayúdanos a escucharnos profundamente los unos a los otros, despierta entre nosotros ese amor mutuo que permite, y, sin duda, garantiza tu presencia espiritual entre nosotros. Porque sabemos, Señor, que ‘sin ti nada podemos hacer’ (Juan, 15:5)”.

Galería de fotos del evento

#WCC70: Chiara Lubich y el Consejo Mundial de Iglesias

Rev. Tveit "Cuanto más nos acercamos a la cruz, más nos acercamos a la unidad" (en inglés)

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