“La peregrinación de justicia, reconciliación y unidad: creo que ahí se refleja fielmente la orientación de la labor ecuménica que tan urgentemente necesita hoy el mundo”, dijo el Rev. Prof. Dr. Jerry Pillay, secretario general del CMI.
Los representantes de los ministerios especializados se dieron cita en el Instituto Ecuménico de Bossey, a las afueras de Ginebra, del 24 al 25 de abril, para reforzar la colaboración y el apoyo mutuo —especialmente en relación con el trabajo programático— y mejorar la planificación y los mecanismos de presentación de informes.
Pillay abordó muchos aspectos de la peregrinación. “En cuanto a la justicia, nos hemos centrado en la justicia económica y seguiremos insistiendo en ella”, afirmó. “Esta incluye la problemática de la descolonización que aborda los fenómenos racistas”.
Asimismo, habló sobre justicia digital: “El progreso tecnológico es fantástico. Pero no olvidamos que uno de sus inconvenientes es que deja a muchas personas atrás”, declaró.

El secretario general de ACT Alianza, Rudelmar Bueno de Faria, dijo que, como grupos religiosos, era importante que contempláramos el contexto global del mundo. “Eso afecta al movimiento ecuménico; afecta al trabajo de las iglesias”, dijo. “La humanidad actual vive una grave crisis de fe, y nosotros, en calidad de iglesias y organizaciones religiosas, debemos confluir con las dinámicas seculares que existen”.
Patricia Talbot, de la Iglesia Unida del Canadá, quien moderó el debate, opinó que la oportunidad de trabajar, pensar y reflexionar sobre las mejores formas de colaborar es más relevante que nunca dado el actual contexto mundial de inestabilidad e incertidumbre.
“Un punto álgido del encuentro ‘Trabajar juntos’ de 2024 ha sido el debate entre los secretarios generales del CMI y de ACT Alianza, el Rev. Jerry Pillay y Rudelmar Bueno de Faria, respectivamente”, dijo. “Ambos afirmaron la apremiante urgencia de que la comunidad ecuménica ‘actúe junta’, especialmente allí donde hay conflicto y sufrimiento humano. Para la comunidad ecuménica, actuar de consuno no es una elección, sino una obligación. Actuar ante los desafíos que plantea el mundo requiere colaboración, tanto si nuestro punto de partida es humanitario como si es ecuménico”.
“Trabajar juntos” es un encuentro anual destinado a incrementar los conocimientos compartidos entre los ministerios especializados y el CMI, a fin de reforzar la colaboración y el apoyo mutuo —especialmente en relación con el trabajo programático—, y mejorar la planificación y los mecanismos de presentación de informes.
Berit Hagen Agøy, de la Iglesia de Noruega, hizo la siguiente declaración: “Esta reunión ha sido profundamente inspiradora. Me voy con la impresión de que el CMI es una organización dinámica que avanza por el buen camino tras superar unos años difíciles con la pandemia, la asamblea y el cambio de gobierno. He advertido los esfuerzos por estrechar la cooperación entre la Secretaría en Ginebra, las comisiones, las iglesias miembros y otros asociados. Y son sinceramente bienvenidos”, aseguró.
Durante la reunión, los asistentes también intercambiaron con miembros del personal del CMI en pequeños debates grupales en torno al trabajo programático previsto en el Plan Estratégico para 2023-2030, las dificultades que prevén y los ámbitos con potencial para la colaboración.
Plan Estratégico del CMI para 2023-2030 (en inglés)

La reunión “Trabajar juntos” tuvo lugar en el Instituto Ecuménico de Bossey, a las afueras de Ginebra, del 24 al 25 de abril.