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Dos programas del CMI, Iniciativas Ecuménicas y Acción Mundial sobre el VIH/SIDA y la Alianza Ecuménica de Acción Mundial, colaboran con el Plan de emergencia del Presidente de los Estados Unidos para paliar los efectos del SIDA y ONUSIDA. El seminario, que será impartido en colaboración con el Consejo Cristiano de Nigeria, abordará los mecanismos de trabajo con dirigentes religiosos y el fomento de sus capacidades, en zonas de conflicto y en otras emergencias humanitarias, para hacer frente a los principales problemas relacionados con la vulnerabilidad al VIH y la prevención de la violencia sexual y de género.
El seminario ha sido concebido para unos cuarenta participantes: dirigentes religiosos, profesionales de la salud, personas que viven con el VIH, migrantes, refugiados, desplazados internos, medios de comunicación y otros. Los estudios contextuales de la Biblia, así como las medidas prácticas propuestas, crearán un equilibrio entre las ponencias en las reuniones plenarias y los debates en grupos reducidos.
“Las organizaciones confesionales ocupan un lugar destacado en la asistencia a las poblaciones migrantes”, afirma Ayoko Bahun-Wilson, coordinador de Iniciativas Ecuménicas y Acción Mundial sobre el VIH/SIDA en África Occidental. “Creemos que el seminario será participativo y transformador”, dijo Bahun-Wilson. “Nigeria presenta una alta incidencia de conflictos que generan un gran número de migrantes, refugiados y desplazados internos”.
