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Representantes de la etnia sami en el Comité Central del CMI (Foto: Marcelo Schneider/CMI)

Representantes de la etnia sami en el Comité Central del CMI (Foto: Marcelo Schneider/CMI)

Procedentes de centros urbanos y pequeñas islas del Pacífico, desde cordilleras y pueblos rurales, más de 170 indígenas se han dado cita esta semana en la desembocadura del río que fluye desde las tierras que tradicionalmente han pertenecido al pueblo sami. Su conferencia, “Los procesos de reconciliación y los pueblos indígenas: verdad, sanación y transformación”, reunió a representantes de más de una veintena de sociedades indígenas con ocasión del Comité Central del Consejo Mundial de Iglesias, en Trondheim (Noruega).

Aunque las personas allí reunidas representaban una amplia diversidad de tradiciones, sus experiencias comunes las unían. El genocidio cultural, la pérdida de tierras y lenguas propias, y la permanente exclusión social fueron temas recurrentes en sus relatos. Sus palabras, incluso sus danzas y canciones, dieron testimonio de la vulnerabilidad y la resiliencia de los pueblos indígenas de todo el mundo.

Los pueblos indígenas del mundo siguen siendo víctimas de manera desproporcionada de la colonización, la opresión, y la explotación en todas sus formas. Las iglesias no han sido inmunes a esta tendencia y en muchos casos se han convertido en cómplices de la destrucción de estos pueblos y de sus formas de vida tradicionales. En la actualidad los indígenas siguen acarreando con esa eterna herencia y luchando para librarse de ella. “En algún punto del camino muchos nos volvimos invisibles, incluso para nosotros mismos”, dijo el Rev. Tore Johnsen, secretario general del Consejo de la Iglesia Sami de Noruega, al Comité Central del CMI; “nos convertimos en nuestros propios enemigos”.

En las reuniones se ofrecieron testimonios en primera persona de indígenas de todas partes del mundo, a través de debates, proyecciones, discursos y actuaciones. Desde Filipinas a Australia, Sudáfrica, Guatemala, y otros lugares, se contaron historias de racismo e injusticia que resultaron demasiado familiares a los asistentes. Varios paquetes de pañuelos esparcidos por el suelo evocaban el trauma que los pueblos indígenas arrastran consigo generación tras generación.

La devastación medioambiental y el cambio climático afectan de manera desproporcionada a las comunidades indígenas y a sus territorios tradicionales. Debido a su estrecho vínculo con los ecosistemas locales y los recursos naturales, a menudo los pueblos indígenas sufren graves violaciones de los derechos humanos e incluso pierden la vida. Las mujeres y hombres indígenas, jóvenes y ancianos, reunidos en Trondheim insistieron en que la justicia para los pueblos indígenas es también justicia para la Tierra.

Escuchar estas voces y aprender de ellas es esencial en el camino hacia la reconciliación. “No podemos llegar a conocernos si nunca nos sentamos a la misma mesa”, reflexionó la Dra. Marie Wilson, comisaria de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación de Canadá.

Los participantes manifestaron su esperanza de poder servir de inspiración e influir en la peregrinación de justicia y paz, de que las experiencias de los pueblos indígenas transformen la búsqueda común de la sanación y la reconciliación. “Quizá sea necesario esperar varias generaciones para sanar a las víctimas y a los opresores”, prosiguió Johnsen, “pero creemos sinceramente que las iglesias cristianas tienen la capacidad de llevar a cabo una peregrinación de justicia y paz en este contexto”.

Entre los tristes relatos también hubo intensos momentos de esperanza y celebración durante los días en Trondheim. Muchos de los participantes aludieron a la presencia de los jóvenes indígenas y al orgullo que sienten por su cultura como fuente de esperanza e inspiración. Los jóvenes contribuyeron a la conferencia con sus propias declaraciones y presentaciones. “El papel de los jóvenes es fundamental”, comentó Wilson; “ellos repararán nuestra ignorancia y se asegurarán de que la próxima generación esté bien informada”.

Véase también:

La solidaridad del CMI con los pueblos indígenas

Reunión del Comité Central del CMI