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Familiares, amigos, colegas y estudiantes de la Rev. Prof. Dra. Mary-Anne Plaatjies-van Huffel participaron en un servicio conmemorativo virtual en su honor en el que lamentaron el fallecimiento de la presidenta del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) para África. Plaatjies van Huffel, conocida como una líder eclesial transformadora en el África subsahariana, falleció el 19 de mayo.
En un mensaje durante el servicio, la moderadora del CMI, Dra. Agnes Abuom, dijo que le resultaba difícil comprender, y aún menos aceptar, que su querida colega se hubiera ido definitivamente.
“Pero no podemos discutir con Dios nuestro Creador, que determina la duración de nuestras vidas”, afirmó Abuom. “La profesora Mary-Anne, como dirigente pionera y visionaria, nos alentó a iniciar un viaje juntos, a reflexionar sobre el futuro del ecumenismo. Extrañaremos su sabiduría y su testimonio”.
Al rememorar la vida de Plaatjies-van Huffel, Abuom habló de su empeño en derribar barreras y sanar la brecha. “Veo un servicio fiel y autocrítico a la iglesia”, dijo Abuom. “Y también veo contribuciones a la historia de la iglesia, el derecho eclesiástico y la teología”.
Lo que es menos obvio, observó Abuom, es el sufrimiento que Plaatjies-van Huffel padeció a lo largo de su trayectoria, las frustrantes luchas que consumieron sus días por la justicia y el bienestar de las mujeres en la iglesia y la sociedad.
“La profesora Mary-Anne fue, desde 2013, presidenta del CMI para África y la lucha de África por la justicia ocupó un lugar central en su vida y sus compromisos”, aseveró Abuom. “Encarnó lo mejor de nosotros”.
El compromiso de Plaatjies-van Huffel con la justicia determinó y agudizó su discipulado cristiano, dijo Abuom. “Creo que su extraordinaria vida es una invitación a ver la unidad de la iglesia en la búsqueda de comunidades plenamente inclusivas, a escuchar el constante llamado a reformar y renovar la iglesia y la sociedad, a responder con un corazón alegre al difícil pero transformador llamado a la conversión que Dios nos pide”, afirmó Abuom. “Estamos orgullosos y agradecidos a Dios por la vida y el testimonio de Mary-Anne”.
