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Rudelmar Bueno de Faria y Robert Granke. © Peter Prove/CMI

Rudelmar Bueno de Faria y Robert Granke. © Peter Prove/CMI

Por Kristine Greenaway

El Socorro Mundial Luterano Canadiense (CLWR, por sus siglas en inglés) y el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) están planificando actividades conjuntas sobre los derechos de los refugiados ahora que el CMI ha aprobado que este organismo de la iglesia canadiense sea uno de sus miembros. Se prevé que el CLWR colabore con el CMI en iniciativas de promoción a través de la Oficina Ecuménica ante las Naciones Unidas en Nueva York.

“El vínculo del CMI con las Naciones Unidas es único”, dice el director ejecutivo del CLWR, Robert Granke. “Gracias a su oficina de Nueva York, tenemos acceso a eventos sobre el tema de los refugiados en el marco de la ONU”.

El CLWR, que está vinculado a la Iglesia Evangélica Luterana en el Canadá, fue admitido como “ministerio especializado” del CMI en la reunión que el Comité Central de esta organización celebró en Trondheim (Noruega) el pasado junio. Las normas del CMI con respecto a los miembros permiten la admisión de organismos relacionados con las iglesias que se especializan en el desarrollo, el socorro, la misión o la labor de promoción.

“El CLWR ha elegido dedicarse al tema de los refugiados y abordar las cuestiones relacionadas con este mandato. El CMI se considera clave en este ámbito”, dice Granke. “La participación en la ONU nos permite trabajar en las políticas y el apoyo a los refugiados a escala internacional”.

Rudelmar Bueno de Faria, representante del CMI ante las Naciones Unidas, acoge con agrado la oportunidad de trabajar con el organismo canadiense, observando que esto aumentará la capacidad del CMI para colaborar con quienes toman decisiones a nivel regional sobre cuestiones de promoción. Un aspecto fundamental del mandato de la oficina de Nueva York es alentar a los dirigentes de las iglesias para que se involucren en la labor de promoción en el marco de la ONU y en sus propios contextos nacionales en relación con temas como la crisis de los refugiados.

“El CLWR cuenta con una larga trayectoria ayudando a los refugiados y facilitando su reasentamiento. Su contribución será primordial para catalizar actividades de promoción personalizadas sobre temas en los que el CLWR tiene experiencia y conocimientos, como es el caso de los refugiados sirios en Jordania. Esto resulta especialmente importante ahora que están surgiendo las crisis de las migraciones y los refugiados”, sostiene De Faria desde su oficina en Nueva York.

Los contactos del CLWR con los responsables de la formulación de políticas en Canadá han aumentado notablemente desde el reciente cambio de gobierno. En 2015, el nuevo gobierno se comprometió a acoger 25 000 refugiados de Oriente Medio para que se reasentaran en el país. Las iglesias ejercen ahora presión para que se acepten más refugiados en 2016. Esta iniciativa afecta también a refugiados de otras partes del mundo, sobre todo regiones conflictivas de África.

La reputación del CLWR por el trabajo que realiza con los refugiados se traduce en que Granke dispone a menudo de oportunidades para reunirse con miembros electos del parlamento y con servidores públicos de alto rango que se interesan por los problemas relacionados con el reasentamiento de refugiados. El objetivo es abogar por que aumente el apoyo a la asistencia a los refugiados en el presupuesto de ayuda de Canadá.

“Somos una de las pocas organizaciones relacionadas con las iglesias en Canadá que se centran en los refugiados, sobre todo en términos de estrategia”, explica Granke. “Nos centramos en promover los derechos de los refugiados y en el apoyo adicional a escala nacional”.

El CLWR fue creado en 1946 para ayudar a los refugiados que llegaban a Canadá desde Europa. Esta historia llevó recientemente al organismo a tomar la decisión de centrarse en los actuales problemas de los refugiados.

La estrategia incluye un programa de “educación en acción” que tiene como objetivo alentar a los luteranos para que se comprometan a título personal a dar la bienvenida a los refugiados y a apoyar las iniciativas de promoción del CLWR.

El organismo es miembro de la Federación Luterana Mundial y de ACT Alianza, una red internacional de organizaciones de ayuda y desarrollo vinculadas a las iglesias. Ambas entidades tienen su sede en el Centro Ecuménico de Ginebra. El CLWR no tenía vínculos formales con el CMI antes de ser aceptado como miembro en calidad de ministerio especializado.

Canadian Lutheran World Relief (en inglés)

Migración y justicia social