Image

“Como cristianos, tenemos esperanza. Creemos que Dios no abandona a la creación y que nosotros mismos podemos convertirnos en faros de esa esperanza sembrando las semillas de un futuro diferente”, dijo el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), en un mensaje de vídeo en el que apela a los cristianos del mundo entero para que oren juntos por la “hermosa obra de Dios”.

El 1 de septiembre, las iglesias de todo el mundo se unirán para festejar el Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación y para conmemorar el Tiempo de la Creación entre ese día y el 4 de octubre, fecha en la que se celebra la festividad de san Francisco de Asís. Muchas organizaciones ortodoxas, católicas, protestantes y anglicanas se sumarán a esta iniciativa con el fin de alentar a los 2 200 millones de cristianos en todo el mundo a orar y actuar en cuestiones ecológicas el próximo mes.

En su mensaje, Tveit observó asimismo otras medidas que pueden adoptar quienes se sumen a las oraciones. “Instemos a nuestros gobiernos a ratificar el Acuerdo de París; exijamos indicadores alternativos del crecimiento que midan mejor la salud de las comunidades y los ecosistemas. Podemos dejar de invertir en combustibles fósiles y volver a invertir en alternativas sostenibles”, dijo.

El difunto patriarca ecuménico Dimitrios I proclamó el 1 de septiembre como el día de oración por el medio ambiente en 1989. El año de la Iglesia Ortodoxa comienza ese día con la conmemoración de cómo Dios creó el mundo. Las iglesias católicas romanas y otras iglesias de las tradiciones occidentales celebran el 4 de octubre la festividad de Francisco de Asís, conocido por muchos como el autor del Cántico de las criaturas.

La Tercera Asamblea Ecuménica Europea, que tuvo lugar en Sibiu en 2007, propuso celebrar un tiempo para la creación durante estas cinco semanas. El Comité Central del CMI invitó el año siguiente a las iglesias a dedicar un tiempo para la creación a través de oraciones y acciones. En 2015, el papa Francisco instituyó también en la Iglesia Católica Romana de todo el mundo la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación el 1 de septiembre.

El esfuerzo colectivo de las diferentes tradiciones en 2016 favorece la oración y la acción por la creación. Con este objetivo, se ha creado el sitio web ecuménico es.seasonofcreation.org para usarlo como centro de recopilación de recursos e información sobre la campaña.

Se anima a los participantes a que emprendan alguna clase de iniciativa de promoción como una forma de llevar su oración a la acción. Además, se realizará un esfuerzo conjunto de concienciación pidiendo que se firme y ratifique de manera urgente el Acuerdo de París, coincidiendo con la Asamblea General de la ONU.

“Mientras el planeta sigue batiendo récords de calor, los católicos debemos responder al dramático llamado a la acción del Santo Padre en Laudato si’”, dijo Tomás Insua, coordinador global del Movimiento Católico Mundial por el Clima. “Y la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación es la oportunidad perfecta para que las parroquias y comunidades católicas intensifiquen su compromiso ecológico y se sumen a otros cristianos para pasar a la acción durante el Tiempo de la Creación”.

Se invita a las personas y las comunidades a organizar servicios de oración a nivel local, que se mostrarán en un mapa mundial para ilustrar el alcance de la colaboración. También se invita a las personas individuales a participar en línea a través de los eventos de Facebook y las campañas de Thunderclap promoviendo el hashtag #SeasonOfCreation.

Las organizaciones convocantes que lideran los esfuerzos de promoción del Tiempo de la Creación son: el Consejo Mundial de Iglesias, la Red Ambiental de la Comunión Anglicana, la Red Mundial de Oración del Papa (Apostolado de la Oración), el Movimiento Católico Mundial por el Clima, ACT Alianza y GreenFaith.

Vídeo del CMI: Orar y cuidar de la creación el 1 de septiembre

Tiempo para la Creación del CMI

Sitio web del Tiempo de la Creación

Labor del CMI sobre el cuidado de la creación y la justicia climática