Mientras el mundo ora por Armenia, el CMI recuerda la “estrecha interconexión entre justicia y paz”

La jornada especial de oración tuvo lugar la víspera del inicio de la COP29, que se celebra del 11 al 22 de noviembre en Bakú, capital de Azerbaiyán.  

El Rev. Prof. Dr. Jerry Pillay, secretario general del CMI, intervino durante el servicio celebrado en la catedral de San Pedro, que contó con la presencia de Su Excelencia el embajador de Armenia, Andranik Hovhannaissyan.

“Hoy nuestras oraciones se dirigen especialmente al pueblo armenio, cuya fuerza y resiliencia están profundamente arraigadas en una herencia centenaria”, dijo Pillay. “Nos unimos al pueblo armenio para pedir la protección de sus derechos a vivir en paz y seguridad en su propia tierra, a preservar su cultura y a profesar libremente su religión”.

Armenia necesita nuestras oraciones

La jornada mundial de oración fue convocada por Su Santidad Karekin II, patriarca supremo y catolicós de todos los armenios, quien pidió oraciones por los rehenes y por la búsqueda de la verdad y la justicia.

“Su apoyo al pueblo de Artsaj, especialmente a los afectados y a las personas detenidas ilegalmente en las cárceles de Azerbaiyán, constituye un profundo testimonio de la solidaridad y la fraternidad cristianas”, declaró el catolicós Karekin II. “Su compromiso de unirse a nosotros en la oración renueva la esperanza en nuestro llamado por la justicia, la paz y la dignidad para todos y, especialmente, por el reconocimiento del derecho de nuestro pueblo de Artsaj y la libertad de nuestros hijos cautivos”.

El arzobispo Nathan Hovhannisyan, director del Departamento de Relaciones Exteriores y Protocolo de la Santa Sede de Etchmiadzin, viajó desde Armenia para asistir a la oración del domingo en la catedral de San Pedro.

“Instamos a todas las comunidades religiosas, organismos internacionales y personas de buena voluntad a unirse a nosotros en oración y a intensificar sus esfuerzos para pedir la liberación inmediata e incondicional de todos los prisioneros de guerra armenios que siguen detenidos en Bakú (Azerbaiyán)”, escribió en su llamado a la oración el catolicós Aram I, catolicós ortodoxo armenio de la Gran Casa de Cilicia y presidente del CMI.

“Recordamos a la comunidad internacional —que se prepara para asistir a la COP29 en Bakú— la estrecha e indisociable interconexión entre justicia y paz. No podemos reclamar justicia climática sin denunciar la violación de los derechos humanos”.

El obispo Dr. Heinrich Bedford-Strohm, moderador del Comité Central, dijo en un videomensaje que “Armenia necesita nuestras oraciones”.

“La fe cristiana ha acompañado al pueblo armenio desde los inicios de la Iglesia Apostólica Armenia en el año 301 de nuestra era”, dijo. Ha dado consuelo a los armenios en tiempos difíciles, “y en los anales de la historia armenia, como el genocidio de 1915-1916”. “Hay mucha fuerza en los corazones y almas del pueblo armenio”.

Recordó que Armenia vuelve a atravesar un momento difícil “tras la agresión militar de Azerbaiyán en Artsaj”, debido a la cual 150 000 personas han sido expulsadas de sus hogares allí y han encontrado refugio en casas armenias.

“El futuro no está claro. Pero estoy convencido de que Dios acompañará al pueblo armenio, y de que nosotros también podemos acompañarlo junto a Dios a través de nuestras oraciones”.

El CMI afirmó que la agresión militar contra la República de Nagorno-Karabaj/Artsaj entre septiembre y octubre de 2020, seguida del bloqueo total del corredor de Lachin durante diez meses y del desplazamiento forzoso de unos 120 000 armenios de sus tierras ancestrales en septiembre de 2023, sigue siendo una de sus principales preocupaciones.

Pillay contó que se encontraba en Armenia cuando se produjo el ataque a Nagorno-Karabaj/Artsaj en septiembre y octubre de 2020. Destacó que el CMI mantiene su apoyo y solidaridad con Armenia y con la difícil situación de los prisioneros de guerra y los rehenes.

“El derecho a la libertad no es negociable. Aunamos nuestras voces para pedir el fin del injusto cautiverio. Que regresen pronto y encuentren reparadora sanación entre sus seres queridos. Oramos por las familias que esperan con angustia y esperanza esos reencuentros y por todas aquellas personas que tienen el corazón en un puño debido al miedo y la servidumbre que genera semejante separación”, declaró Pillay al comienzo del servicio.

Esperanza y fe

“El pueblo armenio nos recuerda la esperanza y la fe, y que esa fe inspira su resistencia ante la adversidad”, dijo Pillay. “Atestigua la fuerza que confiere la fe, una fuerza arraigada en la vida eterna de Dios, y que las iglesias y las tradiciones son tesoros que dan ejemplo de esa resistencia, por lo que nos solidarizamos para velar por que se mantengan a salvo”.

Pillay añadió que esa era la razón por la cual el CMI acogerá el año que viene una conferencia especial en la que se estudiará cómo preservar la identidad de los armenios y también de los cristianos de otros lugares del mundo “donde la identidad cristiana se ve mermada o incluso destruida”. 

El secretario general del CMI dijo: “Hoy, mientras oramos, también hacemos un llamado a los dirigentes y diplomáticos reunidos en la COP29 para que se sumen a la compasión, la justicia y la convicción”.

Pidió que esta fuera una ocasión para demostrar integridad moral y dar testimonio de una identidad humana compartida, “honrando los derechos de todas las personas a vivir sin miedo, a no sufrir el desarraigo de sus tierras y a construir vidas dignas”.

El servicio de oración en Ginebra fue organizado por el CMI, en colaboración con la comunidad armenia, y fue dirigido por el Rev. P. Goosan Aljanian y la Rev. Sandrine Landeau en la catedral de San Pedro. La soprano Varduhi Khachatryan interpretó tres himnos: Havun, havun; Der Voghormya y Christos I mech mer haydnetsav.

Grabación del servicio de oración por Armenia

Galería de fotos del servicio de oración por Armenia

Mensaje de Su Santidad Karekin II, catolicós de todos los armenios (en inglés)

Mensaje y oración del obispo Dr. Heinrich Bedford-Strohm (en inglés)