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El Rev. Eugene Griffin disfruta de un mural collage durante una jornada “Vengan y vean” en Dublín y Glendalough, Irlanda. © Lynn Glanville

El Rev. Eugene Griffin disfruta de un mural collage durante una jornada “Vengan y vean” en Dublín y Glendalough, Irlanda. © Lynn Glanville

Por Susan Kim*

Las parroquias anglicanas de las diócesis unidas de Dublín y Glendalough, en la República de Irlanda, están buscando nuevas sendas y proyectos para 2016 tras examinar los resultados de una encuesta que les ha permitido determinar aquello que han hecho bien y los asuntos que preocupan a los laicos.

Un informe sobre la encuesta, titulado “Vengan y vean”, refleja las aspiraciones, logros y preocupaciones de las comunidades parroquiales de todo Dublín y Glendalough, que se encuentran en las diversas comunidades urbanas y rurales de Irlanda, de aproximadamente un millón y medio de personas.

Los feligreses decidieron centrarse en el tema “Testimonio, culto y acogida” durante 2016 desde la perspectiva específica de las Cinco Marcas de la Misión de la Comunión Anglicana: la manera en que damos testimonio (proclamar la buena nueva), enseñamos (bautizar y formar a nuevos creyentes), servimos (responder a las necesidades humanas), transformamos (desafiar las estructuras injustas y la violencia y buscar la paz y la reconciliación) y valoramos (salvaguardar la integridad de la Creación y sostener la vida en la Tierra).

Los feligreses empezaron por reconocer aquello que ya estaba ocurriendo en sus parroquias o diócesis y que consideraban estimulaba, mejoraba y profundizaba su conciencia de las Cinco Marcas de la Misión. Luego empezaron a desarrollar nuevas iniciativas para ampliar las Marcas de la Misión.

Nombraron 2016 “el año del Vengan y vean” pues siguen creando proyectos y actividades con la misma energía que tenía Jesús cuando dijo a los discípulos: “vengan y vean”.

'Una voz real de los laicos'

Más del 79% de las parroquias respondieron a la encuesta en que se basa el informe “Vengan y vean” (Come&C, en inglés) y “buena parte de ellas se encontraba casualmente sin rector en ese momento”, escribió el Reverendísimo Michael Jackson, arzobispo de Dublín y obispo de Glendalough, primado anglicano de Irlanda, en el prólogo del informe. “Este informe refleja por tanto verdaderamente la opinión de los laicos de la diócesis y, por ello, tiene gran valor”.

Jackson escribió: “La pregunta candente siempre es: ¿Y ahora a dónde vamos? o, ¿cuál es el siguiente paso? Ha sido un honor escucharles dar su propia opinión”.

Cuando los feligreses hablaban de los aspectos que más les enorgullecían de sus parroquias muchos decían tener parroquias afables y abiertas a la comunidad. Se complacían de brindar apoyo a la formación y a la enseñanza de las Escrituras, y se consideraban comunidades que funcionaban tal y como se prescribe en la Biblia.

Al hablar de sus expectativas para el futuro muchos de los encuestados manifestaron el deseo de que la Iglesia de Irlanda se implicara más con los niños y los jóvenes y ofreciera servicios que resultaran atractivos a los más jóvenes.

En una puesta en común de “declaraciones sobre las visiones” de cada parroquia estas expresaron su deseo de ofrecer un testimonio cristiano a la creciente y diversa comunidad y de convertirse en el núcleo espiritual de toda la comunidad.

Discípulos cada día

La iniciativa “Vengan y vean” pretende dotar a las personas de lo necesario para ser discípulos en su vida diaria, ya sea mediante la acción social, proyectos comunitarios o diferentes formas de culto.

El proyecto también pretende rebajar las barreras que existen entre las parroquias, facilitando reuniones para que las personas de parroquias vecinas se conozcan entre ellas y permitir que los miembros de las comunidades parroquiales más pequeñas puedan sentirse parte de una familia diocesana más grande. Muchos feligreses han dicho que el informe “Vengan y vean” había ayudado a la gente a valorar sus propias parroquias con una mirada renovada.

Tres aspectos emergen de forma especial como prioritarios en la vida de las parroquias que han respondido al cuestionario, destaca Jackson en el informe. El primero es que “de toda la Iglesia de Irlanda, estas diócesis son las que más personas presentan para hacer la confirmación”.

El segundo es que se echa en falta un discipulado laico. “El frecuente debate sobre la participación en la comunidad y la amplia variedad de ejemplos de esta, tanto dentro como fuera de las parroquias, está estrechamente relacionado con la necesidad manifiesta de material más creativo y de una facilitación innovadora del discipulado”, escribió Jackson.

El tercero “más que una respuesta es una súplica”; se pide la participación de la Iglesia en toda la comunidad. “Es el reconocimiento de que quienes están en los márgenes tienen una voz en el centro y que esta relación prospera siempre que haya una escucha atenta combinada con actos de amor”.

Conectar con la comunidad ecuménica

Muchas de las parroquias de estas diócesis ya están conectadas con la comunidad de fe más amplia en formas que son inherentes, no solo a la comunión anglicana sino también a otras tradiciones religiosas, afirma Jackson.

“Las Cinco Marcas de la Misión que constituyen el núcleo de 'Vengan y vean' no son exclusivas de la tradición anglicana”, añade. “Son, no obstante, marcas de su expresión. Parte de la emoción y de la invitación consiste en conectar con ellas en las comunidades ecuménicas –y, en efecto, de fe– más amplias, las comunidades a las que pertenecemos a través de la ciudadanía y la vida pública compartidas”.

Jackson insta a la gente a abrazar la alegría de la intencionalidad de lo que se está haciendo dentro de sus parroquias y fuera de ellas. “'Vengan y vean' presenta una idea estructurada del discipulado dotado de propósito e intención. Y además brinda la oportunidad de proclamar la fe que constituye la esencia de cada una de las Marcas de la Misión”, prosigue Jackson. “Cada individuo tendrá ocasión de explorar una o más marcas participando en su contexto y su comunidad y haciendo algo relacionado con la Marca de la Misión en cuestión, estableciendo vínculos entre esa experiencia y las Escrituras, y redactando una oración inspirada en el proceso vivido. El siguiente paso que darán las parroquias será el 'Vayan y cuéntenlo’, para invitar a otros al discipulado a través de sus actos y sus palabras, su vida diaria y su culto público”.

Las mejores prácticas, cada vez más frecuentes

Los feligreses de las diócesis unidas de Dublín y Glendalough reconocen que sus parroquias cuentan con personas comprometidas y de talento en muchos ámbitos del ministerio, que además tienen un corazón servicial. En otras palabras, para las parroquias las personas son uno de sus activos más importantes.

Las parroquias también hicieron referencia a su compromiso ecuménico a través de eventos como la Semana de oración por la unidad de los cristianos, coordinada conjuntamente por la Comisión de Fe y Constitución del Consejo Mundial de Iglesias y la Iglesia Católica Romana a través de su Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.

Las parroquias también informaron de que organizan celebraciones ecuménicas de las principales fiestas cristianas, y muchas de ellas hacen festivales de la cosecha abiertos a otros pueblos de la comunidad más amplia.

Los feligreses están convencidos de que empoderar a los jóvenes y adultos laicos garantizará ministerios en equipo y un apoyo adecuado para los rectores. En el informe 'Vengan y vean' Jackson afirma que, “esta nueva relación permitirá que la energía que tan claramente existe en cualquier comunidad pequeña ocupe su justo lugar a través de la importante contribución que hará a la comunidad en general, tanto dentro como fuera de la tradición cristiana. Todas esas personas son también nuestros vecinos. Este es un reto emocionante para todos nosotros”.

*Susan Kim es una escritora independiente de Laurel, Maryland, Estados Unidos.