Miembros del equipo de comunicación de la Asamblea se reúnen para echar la vista atrás y avanzar juntos

La directora de Comunicación del CMI, Marianne Ejdersten, inauguró la reunión lanzando una pregunta a los comunicadores y las comunicadoras de todo el mundo: “¿Qué es lo que se quedó grabado en sus corazones cuando recuerdan la 11ª Asamblea del CMI?”.

Jack Nasar, de Ramallah (Palestina), recordó que estaba muy agradecido por dicha reunión de denominaciones cristianas de todo el mundo. “Fue muy rica y hermosa”, añadió.

Trina Gallop, de Canadá, que trabajó como redactora en el equipo de información económica, dijo que lo que se le quedó grabado en el corazón fue “poder conectar de manera tan plena con el trabajo más amplio que realiza el CMI y conocer a colegas que trabajan en la misma misión y el mismo ministerio que yo”.

Paul Jeffrey, fotógrafo de noticias estadounidense, recordó “la aptitud de mis colegas, las caras que veo aquí. Trabajar con todos ustedes ha sido divertido, y una aventura”.

Stephen Padre, también estadounidense y redactor a distancia del equipo de información económica, reflexionó lo siguiente: “Fue una alegría estar conectado a esa gran reunión familiar de cristianos y cristianas de todo el mundo”.

Gladwell Rurinja, de Kenia, recordó el carácter diverso y cordial de la asamblea. “Creo que el equipo de comunicación fue una gran familia”, afirmó.

El Rev. Klaus Rieth, de Alemania, que formó parte del equipo de relaciones con los medios de comunicación, expresó su alegría por lo bien que trabajaron juntos todos los miembros del equipo de comunicación. “En el fondo de mi corazón me quedé con la buena disposición que todos y todas mostramos”, dijo. “Todo el mundo quería que la reunión fuera un éxito. Al final, salió bien, y eso lo llevo muy en el corazón y me alegro de que fuera así”, concluyó.

La reverenda Jane Stranz, de Francia, recordó con cariño el tiempo que pasó en la planta 19, en la oficina de prensa. “Lo que realmente me llevo es que llegamos a ser más que la suma de nuestras partes individuales”, dijo. “Fue una gran experiencia”.

La reverenda Margarithe Veen, de los Países Bajos, que trabajó en la zona de intercambio y creación de redes, dijo que todavía recuerda la inmensa alegría que sintió. “Aún llevo en mi corazón a todas las personas que vinieron a la zona de intercambio y creación de redes y lo contentas que estaban de estar allá. Mucha alegría y bendiciones”, dijo. “Vi a tanta gente abierta a los demás, que se preocupaba por los demás”.

Un paso hacia el futuro

Marianne Ejdersten compartió el objetivo de las comunicaciones del CMI de elevar el perfil del CMI para la comunidad y el compromiso. También ofreció una visión general de cómo la Peregrinación de justicia, reconciliación y unidad sirve de base para el trabajo programático del CMI.

Después, los comunicadores y las comunicadoras debatieron acerca de la inteligencia artificial, cómo la utilizan y cuáles son sus preocupaciones.

Sara Speicher, secretaria general adjunta de la Asociación Mundial para la Comunicación Cristiana (WACC, por sus siglas en inglés) y también responsable de comunicación del CMI, habló sobre la justicia digital y la inteligencia artificial.

“La inteligencia artificial es una herramienta que puede ser de utilidad. Pero, como sucede con todas las herramientas, tenemos que usarla correctamente”, dijo Speicher. También ofreció cuatro directrices, al tiempo que aconsejó que cada organización desarrollara sus propias directrices concretas: “obrar con respeto, transparencia, sinceridad y prudencia", dijo.

La WACC, el CMI y la Asociación de Iglesias y Misiones Protestantes de Alemania (EMW, por sus siglas en alemán), publicarán en breve un curso autodirigido, titulado “Just Digital: Big Issues in Small Bytes” (Solo digital: Grandes temas en pequeños bytes), que repasará cuestiones clave relacionadas con la justicia digital, incluida la inteligencia artificial.

Albin Hillert, de Suecia, que formó parte del equipo de fotografía durante la Asamblea, planteó la problemática de la responsabilidad en relación con la IA y las imágenes. “Si perdemos la conexión entre lo que expresamos con imágenes, lo que compartimos visualmente, y el acontecimiento real, corremos el riesgo de descarriarnos”, afirmó.

Sean Hawkey, de Reino Unido e Irlanda, que trabajó como fotógrafo de informaciones económicas, compartió una presentación escrita sobre la IA. “Con los algoritmos, a pesar de que hay muchas más imágenes de las que vemos, nos llega lo que el algoritmo sabe que nos gusta, y así percibimos una visión más limitada del mundo”, señaló. “Así que estamos en un momento inédito en la historia, en el que creo que todo este contexto es importante, en el que el fotoperiodismo está devaluado, en el que abunda el periodismo ciudadano de baja estofa, en el que los valores informativos y los estándares editoriales están perdiendo la batalla contra los algoritmos, y nos hallamos en un panorama político en el que la verdad ya no importa tanto como antaño”.

Mientras los comunicadores analizaban las opiniones, la sabiduría, los recursos e incluso sus propios resúmenes de la reunión generados por la IA, también planearon volver a reunirse en otoño.

Marianne Ejdersten dio las gracias a los y las ponentes y participantes, que llenaron la charla de comentarios interesantes, por estar presentes con la mente y el corazón. “Intenten mantener el equilibrio entre el trabajo y la vida, o los estudios y la vida, y sigan prestando atención al movimiento ecuménico: les necesitamos encarecidamente en diferentes ámbitos”, concluyó.